El cuerpo y la mente de tu hijo se siguen desarrollando de manera notable tras su segundo cumpleaños. El peso de su cerebro es ahora tan solo un 25% más pequeño que el de un adulto y se han formado ya aproximadamente un millón de billones de sinapsis.
Las habilidades motoras, cognitivas y lingüísticas de tu pequeño despegan. Ya sea escalando, saltando o montando en triciclo, jugando al escondite o al pillapilla, tu hijo quiere probarlo todo. Al mismo tiempo, entra en una nueva fase del desarrollo de su personalidad y fuerza de voluntad. Comienza la temible época de los 2 años y muchos padres se preguntan “Pero, ¿qué ha pasado? ¡Mi dulce niñito está irreconocible!” ¡Que no cunda el pánico! Es algo completamente natural. Simplemente, tu hijo está experimentando multitud de nuevas emociones y tiene que aprender a lidiar con su frustración y su ira. Es el momento de demostrar grandes dosis de sensibilidad y empatía como padres.